Somos Lanzarote incide en su apuesta por la gestión pública del agua
Somos Lanzarote ha aprovechado la conmemoración del Día Mundial del Agua, que tiene lugar este martes 22 de marzo, para volver a poner de relieve la necesidad de que un recurso tan esencial como es el agua en la isla esté gestionado desde la ciudadanía.
A juicio de la organización transformadora, para recuperar desde lo público el control de este bien, es necesario apelar a la memoria, «tanto a la histórica, para reconocer la importancia que el agua ha tenido para el desarrollo de Lanzarote, como a la memoria reciente, para entender cómo hemos llegado hasta aquí, y quiénes son los responsables del saqueo de un bien esencial para nuestro desarrollo como sociedad y del medio».
Con este fin, desde Somos Lanzarote tienen previsto iniciar una campaña, bajo el lema «El agua en la isla: memoria, presente y futuro en nuestras manos», que, mediante la acción institucional, pero también a través de actividades divulgativas, ponga en valor el rico legado cultural del agua en Lanzarote, y reflexione sobre el modelo hidrológico y de gestión del agua que precisa la isla.
En este sentido, insiste en la “tristeza que produce que los mismos que hacen llamar nacionalistas hayan dejado en el más absoluto de los olvidos al patrimonio cultural vinculado al agua, el elemento que más ha condicionado la vida en la isla”, dicen.
Somos Lanzarote lamenta que “el debate público abierto sobre el modelo hidrológico de Lanzarote gire exclusivamente en torno a intereses particulares, mientras los hoteleros y sus representantes políticos hacen valer su fuerza pretendiendo que se liberalice la producción de agua desalada, con los perjuicios que podría acarrear tanto sobre el medio ambiente como sobre la sostenibilidad social del sistema público de precios, otros responsables políticos (como el propio presidente del Cabildo, Pedro San Ginés) parecen ahora interesados exclusivamente en que no exista competencia alguna para la empresa a la que ellos mismos privatizaron la gestión del agua».
Frente a ello, desde esta formación asamblearia siguen apostando por “una gestión y control público de un recurso tan fundamental para la isla” como es el agua dulce y la desalada, y exigen que el interés de la ciudadanía «aparezca de una vez» a la hora de debatir una norma tan fundamental como es el planeamiento hidrológico.
