Las Kellys se organizan para combatir la «invisibilidad y explotación laboral»
Las Kellys (las que limpian) llegan para ser más visibles en Lanzarote, después de abandonar su primer estadio en las redes sociales y estrenar este lunes una puesta de largo ante partidos políticos, sindicatos, sociedad insular y medios informativos.
Precisamente un amplio sector de cada uno de estos segmentos acudía esta tarde al acto de presentación del colectivo de las camareras de piso en la Isla, donde precisamente las trabajadoras y los familiares de estas profesionales eran mayoría.
Unas mil limpiadoras de piso trabajan en Lanzarote, y son herederas de aquella iniciativa nacional que nació en Barcelona en 2014.
El cometido principal del colectivo no es otro que, según insistieron, acabar con la “explotación” laboral que afirman estar sufriendo, y lograr con ello salir de la “invisibilidad” social en la que se han mantenido en los últimos años.
Dice María Pazos, una de las intervinientes en el turno inicial de discursos, que los trabajos asignados sólo a las mujeres tienen mucho que ver con “los fraudes contractuales” y la negativa de los hombres a elegirlos. Las definió como “patrañas” de un sistema hotelero donde exigió cambios.
Más al grano aún, inmersa en el día a día de estas profesionales, era luego Miriam Barros quien dejó claro que no abordan temas nuevos, “sólo que ante la crisis -que por otro lado se han inventado los del sector- las condiciones laborales han empeorado mucho”. Ella señaló a las “ineficaces” apuestas sindicales y a la inacción del empresariado hotelero como principales argumentos que explican su situación de hoy.
Manifestaciones y cumplimientos
Entre las propuestas de actuación inmediata del colectivo subrayó su intención de “extenderse a otras islas”, promover modificaciones legislativas que limiten la externalización de estos servicios y “presentarse en la fachada de los complejos hoteleros que atenten contra el convenio de las camareras de piso”.
En el plano legislativo, también puntualizó la iniciativa de Podemos, que presentó una Proposición No de Ley en el Parlamento de Canarias para dignificar la situación de las camareras de piso, ya que estiman que la medida no ha contado con la opinión de las afectadas.
“Denunciar públicamente y de forma clara cuál es la situación”, este es el objeto de una reorganización de profesionales que tienen mucho en común, como pudo observarse este lunes en la Casa de la Juventud de Arrecife.
Eso sí, apostillaron que Las Kellys lanzaroteñas se presentaban sin poder reunirse con antelación con los representantes empresariales, aunque sí con varios sindicatos y partidos políticos de la Isla, también presentes. En cuanto a la patronal lanzaroteña, sin representación allí, apuntaron que “no son sensibles a los problemas” que sufren las camareras de piso.
El colectivo agradeció en cambio el recibimiento social que sus demandas sí están teniendo entre la población durante las últimas semanas.
Las Kellys han nacido “para presionar” y para que “la situación cambie”… Y la situación es –denunciaron en varios discursos- “que reciben amenazas”; “que firman contratos de 5 horas y trabajan más de 8”; “que no pueden coger bajas por cuestiones médicas por miedo a ser sustituidas y perder su trabajo”, “y que reciben partes de 20-25 habitaciones diarias a un ritmo que es insoportable”.
