IC reprocha al partido de Montelongo el uso electoral del conflicto laboral
El conflicto laboral de los trabajadores del consistorio los ha llevado en varias ocasiones a manifestarse durante este mandato.
En Intersindical Canaria (IC) no ha gustado el apoyo público mostrado desde la Agrupación Socialista por Lanzarote (ASL) a los trabajadores del Ayuntamiento de Arrecife. En la sección sindical del consistorio capitalino consideran que es una forma de “politizar” el comunicado reivindicativo que emitieron esta semana donde anunciaban movilizaciones durante el próximo mes.
Señalan al partido del que fuera alcalde de Arrecife, José Montelongo, y afirman que “parte de los integrantes del recién creado partido político ASL, son responsables subsidiarios de los desmanes del Ayuntamiento de Arrecife”; y relatan una serie de hechos como el cese -dicen “injusto- del Secretario del consistorio, “abocando a dicho empleado a recurrir a la justicia para que le dieran la razón”. Y reprochan a algunos de los actuales miembros de ASL que este pleito “ocasionó al Ayuntamiento “un quebranto económico valorado en 200.000€ en sueldos atrasados, al ganar las demandas”.
También le echan en cara desde la sección sindical el posterior nombramiento de “un trabajador sin categoría profesional (auxiliar administrativo) para realizar funciones que no le correspondían como Secretario”; y el que algún miembro del mencionado partido, “no regularizara la RPT, y de estos barros aquellos lodos…”.
“Los defensores políticos de los trabajadores, son los mismos que autorizaban trabajos de superior categoría de personal sin calificación de técnicos, demandando al Ayuntamiento, ganando juicios millonarios por trabajos de superior categoría. Y son los mismos que instruyeron expedientes disciplinarios contra representantes sindicales, solo por defender la libertad de expresión, siendo condenados en costas al perder los juicios”, según acusan a la Agrupación Socialista por Lanzarote desde el sindicato Intersindical Canaria.
Por todo ello, invitan a esta formación a “mirarse el ombligo antes de mirar el del prójimo, y no utilizar a los empleados públicos como arma electoral”; y les advierten de que un cambio de siglas no supone un cambio de actitudes: “Los que ahora pretenden defender a los trabajadores del Ayuntamiento, tuvieron mucho tiempo cuando ostentaban responsabilidades, y solo con el cambio de siglas no se solucionan los problemas”, concluyen.
