Guardia Civil y Cabildo intervienen dos anclas del XVII ofertadas en Internet

A falta de una datación exacta, las anclas que ha intervenido la Guardia Civil, en la colaboración del Cabildo de Lanzarote, en una nave de la calle Escotilla (Arrecife) podrían corresponder a un período entre los siglos XVII y XVIII, según los investigadores.

Fue un vigilante del Servicio de Patrimonio Histórico del Cabildo lanzaroteño quién detectó su venta y avisó al DEPRONA (Destacamento de Protección de la Naturaleza) de Timanfaya. En concreto, el pasado día 6 de marzo fue cuando el vigilante advirtió en Internet que una persona, española y con domicilio en la Isla, vendía dos anclas con un potencial valor histórico.

Conocidos los hechos, el miércoles de la semana pasada, el DEPRONA acudió al lugar donde se ofertaban las piezas, un recinto propiedad de una empresa -la cual colaboró en todo momento y autorizó la inspección correspondiente- en donde se encontraban las anclas, en la calle Escotilla de Arrecife, cerca de Puerto Naos.

Tras localizar al vendedor, éste se personó y admitió a los agentes de la Guardia Civil que era el propietario, pero no poseía ningún título o documento que amparase la procedencia legal de aquellas.

Consecuentemente, al no comunicar a las autoridades competentes el hallazgo de las anclas e intentar traficar con ellas, fue denunciado. La Ley 4/1999 de Patrimonio Histórico prevé diferentes sanciones ante actos que dañen o perjudiquen los bienes y objetos históricos y arqueológicos, las cuales son en su mayoría multas que pueden alcanzar los 600.000 euros. En este caso en concreto, según aclaran los investigadores, la normativa establece multas de entre 3.001 y 150.000 euros.

Tras la incautación, la Guardia Civil pidió colaboración al Cabildo para el traslado de las anclas, que fueron depositas el pasado día 10 de marzo en el Fondo Arqueológico de la Institución.